Nací y crecí en Puerto Rico, pero ahora llamo hogar a Orlando, Florida. Vivo aquí desde hace 3 años y medio. Mi impulso por ayudar a las personas a superar sus condiciones de salud y dolencias es solo una de las muchas razones por las que elegí ser médico. Una de las primeras experiencias que me motivó fue presenciar la lucha de mi abuelo contra la enfermedad de Parkinson. Ser médico es un privilegio que me permite brindar lo mejor de mi a la humanidad. Para mí, un buen día de trabajo significa mejorar la vida de los demás, tratar con éxito sus condiciones de salud e inspirarlos y motivarlos a vivir un estilo de vida saludable. En Sanitas, los pacientes reciben tratamiento y cuidado de un equipo dedicado que no solo es apasionado sino también totalmente comprometido e impulsado a mejorar la salud de los demás. Personalmente atiendo y trato las necesidades de cada paciente para que podamos ayudarlos a vivir una vida sana y plena con sus seres queridos. Cuando no estoy trabajando, disfruto hacer ejercicio, ir a la playa y viajar con mi familia.