Nací y crecí en La Habana, Cuba, donde estudié medicina y completé mi residencia en pediatría. Debido a mis convicciones personales y políticas, huí de Cuba en 1994 para alcanzar mis metas profesionales. Antes de llegar a los Estados Unidos, pasé seis meses sirviendo a la comunidad de la Bahía de Guantánamo, donde confirmé mi capacidad para brindar la mejor atención médica posible. Luego regresé a mi “casa”, la Florida, y espero seguir cuidando de las condiciones de mis pacientes. Mi idioma natal es el español, pero también domino el inglés. He comprobado que ser bilingüe me ayuda a comunicarme mejor con mis pacientes de distintas culturas. Mi gran compasión por los demás y mi sentido del deber me motivaron a dedicarme a la medicina. Los años que he dedicado a la medicina han sido los más gratificantes de mi vida. Un buen día en el trabajo es cuando ayudo a mis pacientes a sentirse mejor al dedicarles tiempo, los educo a ellos y a sus familias, y contribuyo a mejorar su salud de cualquier manera posible. Quiero que sepas que en Sanitas brindamos a nuestros pacientes un cuidado de alta calidad en un ambiente compasivo para promover una mejor salud y bienestar. Cuando me quito mi bata, me encanta viajar con mi esposa, compartir con mi familia y amigos, nadar y montar en bicicleta.